Los Cartagineses y las Guerras Púnicas Los fenicios, un pueblo comerciante del Asia Menor, se estableció en el África septentrional desde el siglo XII a.C. en colonias, que funcionaban como campamentos de descanso en sus viajes a Gades, la actual Cádiz.
La colonización se inicia con la fundación de Cartago en el año 814 a.C. por habitantes del reinado de Tiro, y se convirtió en la capital de una república marítima que extendía sus redes comerciales por la España mediterránea y por el Norte de África. Esta primacía provocó la rivalidad con Roma, dando inicio a las Guerras Púnicas, mantenidas entre Roma y Cartago por la posesión de Sicilia y las rutas comerciales.
En la primera de ellas, entre los años 264-241 a.C.. Cartago perdió las islas de Sicilia, Cerdeña y Córcega. La segunda Guerra Púnica, que se desarrolló entre los años 218-202 a.C., tiene su punto de partida en las localidades de Sagunto y Valencia, colonizadas por Aníbal. Este general, para adelantarse a los romanos, cruza los Pirineos y los Alpes saliendo victorioso en las ciudades de Tesino, Trebia, Trasimeno y Cannas llegando hasta las puertas de Roma. Los romanos enviaron a Escipión el Africano y Aníbal, que había vuelto de Italia, fue derrotado en Zama en el año 202 a.C.. Los contraataques dieron de nuevo la victoria a los romanos, gracias al apoyo de un jefe beréber llamado Masinissa, que era el rey de los Numidias y Cártago aceptó una paz humillante y perdió todas las colonias y parte de sus territorios africanos.
A mediados del siglo II a.C.. los cartagineses atacaron a los Numidias, que los acosaban constantemente, y Roma declaró lo que sería la tercera Guerra Púnica, que tuvo lugar entre los años 149-146 a.C., siendo una guerra corta y decisiva. Las legiones romanas sitiaron la ciudad de Cartago y después de una persistente resistencia, en el año 146 a.C.., la villa fue destruida definitivamente por Escipión Emiliano tras un escalofriante suicidio colectivo.
Imperio Romano.
El Dominio Romano Cartago fue reconstruida más tarde llegando a ser capital de la provincia del África romana. Los romanos otorgaron la libertad a las antiguas ciudades cartagineses para evitar conflictos con los Numidias a los que vencieron en Yugarta. Fue durante el dominio de Cesar cuando Cartago fue reconstruida después de anexionarse el resto del norte de África, brillando con resplandor desde el siglo I hasta el siglo VI. Entonces surgieron ciudades como Thugga, Thuburbo, Majus, Regia y Maktar. La riqueza de la provincia no se debía al comercio, como en la época púnica, sino a la agricultura. Al igual que Egipto, la provincia se constituyó en el granero de Roma lo que hizo que Cartago llegara a ser la tercera ciudad en importancia del imperio, después de Roma y Alejandría.Con la caída del Imperio Romano el territorio africano siguió las mismas vicisitudes y en el año 429 de nuestra era los vándalos asaltaron y tomaron Cartago.
Vándalos y Bizantinos.
Procedentes de Andalucía, los vándalos conducidos por Genserico conquistan la provincia romana de África. Sin embargo, después de la muerte de su líder en el año 447, sus seguidores fueron incapaces de proseguir sin él. Los vándalos que subsistían, fundamentalmente, gracias a la piratería y debido a la anarquía que reinaba entre ellos no consiguieron mantener su supremacía.
En el año 534, el emperador Justiniano, del Imperio Romano de Oriente o Bizantino, envía una armada al mando del general Belisario, poniéndose fin al caótico estado vándalo. Se creó, de nuevo, la provincia de África y los bizantinos consiguieron restablecer el orden y defender su territorio de los beréberes del sur y del oeste.