Edad Media de Túnez

Mulay Ahmed de Túnez, último sultán hafsí
Mulay Ahmed de Túnez, último sultán hafsí

El Dominio Arabe

En el año 647 d.C. se inician las primeras incursiones de los árabes, que, a los 15 años de la muerte de Mahoma y movidos por las enseñanzas del Profeta, conquistan los territorios del norte de África venciendo a los bizantinos. Fue el califa Utman quien decide invadir los territorios, que rebautizados por los árabes se llamaron Gran Magreb e Ifriquiyah, la actual Túnez.

Los árabes se impusieron progresivamente y, después de la fundación de Kairuán en el año 670 y tras la toma de Cartago en el 698, se hicieron dueños absolutos del territorio. Sin embargo, los beréberes que se convirtieron al Islam lo hicieron desde la rama radical kharechita o jariyita, la cual defendía la igualdad de todos los musulmanes, provocando a lo largo del siglo VIII inacabables revueltas entre los extremistas del Islam y los sunnitas.

En el año 800, Ibrahimibn el Aghlab, fiel a los abbasíes, se impuso como mediador entre los beréberes, por lo que el califato de Bagdad le concedió el título de emir. El período aglabí trajo a lo largo de casi un siglo el bienestar, la calma y el florecimiento cultural al país. Sin embargo, los problemas de sucesión califal provocaron el nacimiento de diferentes sectas religiosas, entre las que se encontraban la de los fatimíes, al frente del Abu Abd-Allah, quienes en compañía de los beréberes Ketama conquistan Kairuán en el año 969. Con el tiempo se decide cambiar y se construye la ciudad de Mahdia, situada en la costa oriental tunecina.

Movidos por el ideal de construir un gran estado para destruir a los abbasíes deciden hacer incursiones en Egipto. Tras varios fracasos, consiguen en el año 939 triunfar y fundan la ciudad del Cairo, dejando a Túnez en manos de los ziríes beréberes.

En el año 1048 los ziríes intentan liberarse de la soberanía fatimí, y se produce la ruptura con Egipto. Sin embargo, el califa de El Cairo envía a los nómadas salteadores de Banu Hilal, que consiguen invadir el territorio Túnez en el año 1057. Los Hilalíes devastaron por completo el país, sumiéndolo en la más absoluta de las anarquías. Al mismo tiempo los normandos ocupaban Sicilia y desembarcan, finalmente, en Túnez en el año 1148. Pero, los normandos fueron expulsados en el año 1159 por las tropas marroquíes almohades que ocupan el país. Se inicia un corto período de prosperidad que se ve interrumpido por el hijo de Abu Hafs, que a la muerte de su padre decide autoproclamarse emir, iniciando el período Hafsida.